lunes, 31 de agosto de 2015

Lo que vale una vida



Ayer sábado pude llegar a la conclusión que gran parte del país conoce, una parte más grande teme, y una pequeña parte acepta como hecho.

"La vida vale lo que decida el del arma"

Lo pongo en cita porque con esa frase nos encaró una vez un profesor de la universidad mientras hablábamos de Políticas Públicas. Quizás en ese momento sonó a chiste y no le veíamos la ironía al asunto, pero de allí surgió una conversación que me quedó grabada en la cabeza:

- Piensen por un momento que están en su casa y un ladrón entra con la clara intención de llevarse lo que sea. tienen dos opciones: O cumplen las exigencias o se buscan que los maten. Así de sencillo.

- Pero profe -alzó la mano una estudiante- ¿Qué para eso no existe forma de defenderse?

- Sí, tienes constitucionalmente el derecho para hacerlo, pero en la realidad, no hay peor cosa que hacer eso.

La cara del salón fue una expresión de confusión completa.

- ¿No tengo el derecho de caerle a tiros si puedo?

- Podrías, pero dependerías de un acto de suerte, que no se encasquille tu arma o que sencillamente te maten antes de moverte. ¿No recuerdan acaso que cuando comenzó el período presidencial de Chávez, él le preguntó en un acto público Cecilia Sosa (que en ese momento era la presidente de la Corte Suprema de Justicia), si no robaría por hambre? En pocas palabras, dijo que "Robar por hambre no es delito"

- Eso es estúpido. -uno de los estudiantes replicó- Aunque lo diga el Presidente, la ley dice-

-La ley puede decir lo que le de la gana a los que la escriben. No existiera un Código civil y un Código Penal de no ser así. El problema con esa frase es que crea un precedente. -se acercó al muchacho- Ustedes bromean sobre esas cosas y pueden hacerlo; si un amigo te dice eso, ríes; cuando un funcionario lo hace: te extrañas; cuando lo hace el Presidente... mi amigo, tienes un problema entre manos.

Nos estiramos en nuestros asientos no por pesadez o pereza, sino por algo de preocupación y confusión.

- Vivimos en una sociedad en la cual tu vida vale lo que decida el del arma. ¿No tienes 10 bolívares? Pum ¿Te tardaste en abrir una puerta? Pum ¿No recuerdas la contraseña? Pum ¿No tienes caña? Pum ¿Me miraste feo? Pum.

A esta altura de la clase el silencio era unánime.

- Odio romperles su felicidad muchachos, pero este es un país donde se cumple a cabalidad lo que Douglas MacArthur dijo durante la Segunda Guerra Mundial... hay leyes... sí; hay códigos, también... pero eso es sencillamente tinta gastada en el papel, y como él muy bien dijo...

En ese momento el profesor tomó una tiza y escribió una frase que día a día mientras camino por la calle, voy recordando. En cada noticia de un asalto, en cada nota de un secuestro, en cada post de un homicidio, y hoy cuando dos sujetos entraron a la fuerza al instituto para llevarse nuestras cosas con arma en mano, cuando una amiga estuvo a segundos de perder a su prometido, un chico a momentos de quedar traumado y a mi novia estar silente, detallé cada palabra mientras me supeditaba a seguir las órdenes erráticas de aquél sujeto y mientras la policía luego de todo eso nos tomó la declaración:

Whoever said the pen is mightier than the sword obviously never encountered automatic weapons

jueves, 11 de septiembre de 2014

LUZ - La travesía: DLC ¡EDICIÓN ANIVERSARIO!

Antes de que me digan "¿Lo único de lo que escribes en tu blog es ésta basura?" les doy una respuesta.

Es mi blog, puedo darme ese lujo. 
(y para que resalte se los subrayo y pongo en negrita e itálica)

Verán, hoy se cumplen 123 años de la reapertura de LUZ. Pensaba en hacer un pequeño párrafo para hablar sobre algunas cosas de la universidad, buenas y malas por igual. Sin embargo, como hay que hacer las cosas como se deben hacer -además de que no romperé mi espíritu de inconformidad- decidí realizar la variación más grandiosa.

Ya yo había hecho dos posts sobre mi travesía en LUZ: En la primera y la segunda parte narré todo mi recorrido en LUZ utilizando un sistema de trofeos similar al de un juego de PS3. Así que, ¿Cómo superar un juego que ha obtenido millones de ventas y que actualmente cuenta con 68.000 jugadores activos?

Fácil, CREA DLC'S!

Y eso hice. Mientras escribía los títulos de mis trofeos, le pedí ayuda a varios estudiantes de diversas carreras de LUZ para que ellos mismos crearan sus propios trofeos de La Travesía y narraran sus propias historias tal y como lo hice yo. La respuesta fue bastante buena y muchos se ofrecieron a ayudarme. Así que en agradecimiento, les presento la continuación 

Ta-daaan. No le pagué al diseñador como debía, así que tuve que hacerlo de mala gana (?)

Así que, ¿en qué consiste el dichoso DLC? Pues ésta pack comprende un total de cinco campañas en cinco de las Escuelas de LUZ, narrados por sus protagonistas. Les comino a leerlos hasta el final, cada uno representa un pedazo de la historia de un estudiante real de LUZ, por los que le pido hagan el esfuerzo (y bueno, que también hay texto al final). Ahora, sin más que decir, les dejo los trofeos que conforman éste DLC que espero no sea el único:

PANDA'S DAY (Escuela de Letras)

CÁLCULOS ILUMINADOS (Escuela de Contabilidad Pública)

 




EL RELATO DE LA PERIODISTA (Escuela de Comunicación Social)







EL DÍA DEL DOCTOR (Escuela de Ciencia Política)




DORMIR ES PARA DÉBILES (Escuela de Diseño Gráfico)






Y con ésto, damas y caballeros pongo punto final a mi pequeño homenaje a los 123 años de LUZ. Como han podido ver, hay muchas historias que han surgido con el paso del tiempo. Dejé a propósito trofeos que a pesar de tener similares en la lista principal, igual reflejan que las historias de cada estudiante, independientemente de la falcultad o escuela en que curse, son similares entre sí.

Quiero como última cosa por el día de hoy, dejarles un pequeño mensaje. Cuando entren a una universidad, deben comprender un par de cosas: la primera es que ingresarás a otro mundo y aunque creas que estás totalmente preparado, no lo estás; la segunda, que no importa los tropiezos que consigas, siempre habrá alguna forma de sortearlos como has odido observar a lo largo de ésta lista.

Todos están basados en experiencias reales, todos tienen alguna carga de dramatismo para efectos de entretenimiento, pero reflejan la realidad del estudio actualmente en la Universidad del Zulia. Somos considerados y por supuesto que nos importa nuestra alma máter, pero a veces las cosas que deberían ser simples trámites o situaciones sin ninguna complicación se convierten en verdaderos retos que debemos superar. El resultado son las historias que ven allí arriba...

Así que cuando un idiota con un blog les pregunte ¿Tienen lo necesario para sobrevivir?, respóndanle:

No importa si lo tenemos o no, pero no moriremos en el intento